A través de los reconocimientos de superficie y las excavaciones arqueológicas que se han efectuado en el valle de Toluca ha resaltado de forma evidente la presencia teotihuacana, como en muchos otros sitios mesoamericanos. No obstante, en este caso específico, no se trata únicamente de una manifestación de “influencias” teotihuacanas, sino que la presencia de la urbe tuvo profundas implicaciones en el desarrollo histórico del valle de Toluca, con el que mantuvo relaciones tan estrechas, que marcó por completo los procesos que serían determinantes en su historia._x000D_ Pues todo indica que no se trató únicamente de una interacción o relaciones de intercambio, sino de procesos más complejos que tuvieron que ver con el poblamiento y el abandono del valle, su colonización, sus formas de vida y de pensamiento, y que todo ello estaba asociado con factores como la cercanía geográfica y las propias características del valle, que por su gran fertilidad, abasteció de granos y otros alimentos a la enorme población de Teotihuacan._x000D_ Este proyecto tiene como objetivo principal aclarar de manera puntual cómo se dieron las relaciones entre el valle de Toluca y Teotihuacan, pues hasta el momento esta problemática se conoce sólo de manera general, a un nivel regional, pero no en los niveles más básicos de la sociedad._x000D_ Para poder aproximarnos a estas cuestiones, partiremos del análisis e interpretación de los materiales arqueológicos de tres sitios contemporáneos en los cuales la presencia teotihuacana se manifiesta en múltiples aspectos, que son San Mateo Atenco (SMA), Santa María Rayón (SMR) y Santa Cruz Atizapán (SCAT)._x000D_ De los materiales arqueológicos se seleccionaron la cerámica, miscelánea, lítica, hueso, y otros materiales relacionados con prácticas rituales, de los cuales tratará de extraerse la mayor información posible mediante diversos análisis que siguen la misma metodología del Proyecto Arqueológico Santa Cruz Atizapán, los cuales se explicarán de manera más detallada en el apartado sobre las estrategias metodológicas._x000D_ Se retomaron estos sitios para observar cómo las diversas expresiones teotihuacanas se manifestaron en sitios con entornos ambientales distintos, como son la zona pantanosa y la zona de tierra firme.

A pesar de su cercanía (o a causa de ella) con la cuenca de México, el valle de Toluca ha sido una región poco estudiada, ocasionando que la falta de datos e información arqueológicos impidiera durante un largo tiempo la comprensión integral de la historia de la región. Esta marginalidad como objeto de estudio es también un reflejo de la marginalidad en la historia antigua del valle, el carácter rural de sus asentamientos y su pausado desarrollo._x000D_ Aunque se ha logrado un gran avance en el largo camino por desentrañar el pasado prehispánico de la región, los conocimientos que de éste se tienen hasta el momento puede decirse que se han establecido en una escala macro y aún quedan por explicar múltiples aspectos que también pueden caracterizar la historia del valle en otros niveles más elementales o específicos._x000D_ Aún cuando se ha planteado la supuesta incorporación del valle de Toluca en el sistema mundial teotihuacano, parece ser, como lo muestra la evidencia arqueológica, que esta región siempre permaneció al margen y es probable que no se tratara de una interacción establecida entre ambos, sino de una imposición por parte del poder hegemónico de la urbe sobre el valle._x000D_ Para poder determinar el tipo de relaciones que se generaron entre éstos es necesario partir de otros niveles de análisis de la sociedad, desde los más básicos, como sería, por ejemplo un contexto doméstico, hasta los más complejos, como el nivel ideológico._x000D_ Partiendo de esta perspectiva, las excavaciones sistemáticas de los sitios San Mateo Atenco, Santa María Rayón y Santa Cruz Atizapán, nos dan la pauta para indagar y profundizar sobre estos aspectos, constituyendo el primer estudio que se enfoca puntualmente en esta etapa tan importante, que incluso puede considerarse como el momento más crítico de la historia no sólo del Altiplano Central, sino de toda Mesoamérica.